Subordinadas adverbiales: propias e impropias

Las oraciones subordinadas adverbiales constituyen una parte compleja de la sintaxis. Tradicionalmente se ha dicho que las subordinadas adverbiales desempeñan la función de complemento circunstancial del verbo principal. Sin embargo, como establece la RAE en el Manual de la NGLE, esta definición no es exacta.

Las oraciones adverbiales son básicamente de dos tipos:

1. propias. Son las que desempeñan la función de los adjuntos que modifican al predicado verbal o de los adverbios por los que pueden ser sustituidas. Podemos tener las siguientes oraciones adverbiales propias:
   • de tiempo. Por ejemplo: quando ovo ocurrido, todos se maravillavan; Quando lo vio doña Ximena a pies se le echaua.
   • de lugar. Por ejemplo: assi las en bio dond ellas son pagadas. 
   • de manera. Por ejemplo: Passaron Mata de Toranz de tal guisa que ningun miedo non han; Miran Valençia commo iaze la çibdad; veran las moradas commo se fazen.
   • de cantidad. Por ejemplo: Alegre es myo Çid por quanto fecho han.
2. impropias. A pesar de que sean oraciones adverbiales, no se pueden sustituir por un adverbio. Los dos miembros o períodos de que se componen (prótasis y apódosis) expresan una relación lógica.
   • adversativas. Generalmente consideradas coordinadas adversativas (en lugar de subordinadas). Expresan un contraste entre las dos cláusulas que componen la oración. En la actualidad el principal nexo adversativo es pero aunque en la época medieval el más representativo fue el nexo adversativo mas: "Çientol pidieron, mas el con dozientos va".
   • causales. Expresan la causa, el motivo o la razón por la que ha ocurrido la acción expresada por el verbo principal. Algunos de los nexos que introducen estas oraciones son: porque, como, ya que, dado que, etc. En el texto encontramos: Pesol al Rey de Marruecos de myo Çid don Rodrigo: "Que en mis heredades fuerte mietre es metido". Esto non de tardo, ca de coraçon lo han; el yvierno es exido, que el março quiere entrar; Creçem el coracon por que estades de lant.
   • comparativas. Pueden indicar igualdad, superioridad o inferioridad. No se pueden sustituir por un SN y, por tanto, no son subordinadas sustantivas, sino subordinadas adverbiales. Las comparativas de inferioridad y de superioridad suelen ir introducidas por que o de, mientras que las de igualdad van generalmente encabezadas por como. En el texto encontramos: Tal tienda commo esta.
   • concesivas. indican un obstáculo o una objeción a lo que se expresa en la principal, sin que se impida su cumplimiento. Los nexos más comunes para estas oraciones son: aunque, sin embargo, pero, etc. En castellano medieval, aparte los nexos que se indican, se utilizaban también otros: maguer (que) y comoquier que. Son ejemplos de concesivas extraídos del texto del Myo Çid:  Mager que mal le queramos, non gelo podremos fer, Mager de todo esto, el Campeador contado.
   • condicionales: indican una hipótesis o una condición para que se produzca lo que se ha expresado en la principal. El nexo principal para estas oraciones es si. Por ejemplo: sed en este palaçio, & si quisieredes en el alcaçar.
   • consecutivas. indican la consecuencia de lo que se ha expresado en la principal. Los nexos más frecuentes suelen ser: de manera que, de modo que, así que, conque, luego, etc. 
   • finales: expresan finalidad o intención. Los nexos más representativos suelen ser: para (que), por, a fin de, etc. En el texto se documenta: En vio dos cavalleros Mynaya Albarfanez que sopiesse la verdad.