DEPRENDER.

DEPRENDER. v.

Aprender (trans.) (ant.). Usóse hasta el siglo XVII en el lenguaje culto; en el vulgar se conservó hasta el XVIII, como lo sugiere el Dicc. Autor., y lo muestra el siguiente pasaje: «Lengua como chapurráa --- ½ Términos que allá deprenden ½ Por Francia ó por Alimaña.» T. Iriarte, La señorita malcriada, 1. 2 (7. 109).

— a ) Siendo el acus. un sust. «Si el Señor no me mostrara, yo pudiera poco con los libros deprender, porque no era nada lo que entendía.» Sta. Ter. Vida, 22 (R. 53. 701). «Sin deprender, ni haber trabajado nada para saber leer --- hállase toda la ciencia sabida ya en sí, sin saber cómo ni dónde, pues aun nunca había trabajado, aun para deprender el A B C.» Ead. ib. 27 (R. 53. 822). «Este es vuestro trato y lenguaje; quien os quisiere tratar depréndale, ó si no, guardaos de deprender vosotras el suyo, que será infierno.» Ead. Cam. perf. 20 (R. 53. 3442). «Si los que os trataren quisieren deprender vuestra lengua (ya que no es vuestro de enseñar) podéis decir las riquezas que se ganan en deprenderla.» Ead. ib. 20 (R. 53. 3442). «Por eso digo, hijas, que pongamos los ojos en Cristo, nuestro bien, y allí deprenderemos la verdadera humildad.» Ead. Mor. 1. 2 (R. 53. 4381). «¡Oh si deprendiesen algo de la humildad de la Virgen santísima!» Ead. Concept. 6 (R. 53. 4021). «En esta jornada deprendió mucho y aprovechó mucho en unas letras y en otras, y volvió muy mejorado.» Sig. Vida de S. Jer. 9. 1 (71). «Parécele á Jerónimo que aun hay tiempo para ser discípulo, y que hay en otros mucho que puede él deprender, y que en él no hay nada para que otros deprendan, y si alguna vez enseña, es de puro importunado.» Id. ib. 5. 1 (388). «Sin duda te pusieron á deprender conciencia en casa de algún sastre.» Quev. Cartas del caball. de la Tenaza (R. 23. 4581).

— a a ) Pas. «Es un glorioso desatino, una celestial locura, adonde se deprende la verdadera sabiduría.» Sta. Ter. Vida, 16 (R. 53. 561). «Nunca inventaron mejor género de música, tan fácil de deprender, tan mañera de tocar, tan sin trastes, clavijas y cuerdas.» Cerv. Nov. 3 (R. 1. 1422).

— b ) Con de, para señalar la persona que comunica el conocimiento ó es fuente de él. «Vos --- ½ De quien todas estas cosas ½ A mi costa he deprendido.» Castillejo, 1 (R. 32. 1361). «Tiénenla por poco humilde y que quiere enseñar á de quien había de deprender.» Sta. Ter. Vida, 20 (R. 53. 672). «De sus padres cristianísimos deprendió la ley y fe cristiana, con las buenas y santas costumbres.» Sig. Vida de S. Jer. 1. 1 (22). «Enseñábales lo que de él querían deprender, y deprendieron mucho.» Id. ib. 4. 9 (324). «Deprended, dijo, de mí, que soy manso y humilde de corazón.» Muñoz, Vida de Gran 2. 2 (84). «Deprenderán deste hecho los príncipes cristianos á no poner en disputa las verdades de la fe.» Márquez, Gob. crist. 2. 13 (255: Pamplona, 1615).

— g ) Siendo el acus. un infin. «Deprendió [Aquiles] de su maestro Quirón tañer vihuela.» Comend. Griego, Lab. 116 (382) «¿Para qué los hombres deprenden hablar griego?... El fin para que los hombres han de estudiar ha de ser para deprender bien vivir.» Guev. (Capm. Teatro, 2. 91). «Sócrates también deprendía en el suyo [en su nombre, derivado de sîj, sano] guardarse á sí y á los que con él trataban, sanos y salvos, no del cuerpo sino de las enfermedades del alma.» Sig. Vida de S. Jer. 1. 1 (18).

— a a ) También se usaba con á como aprender. «¿Por qué lo niegas? — Porque deprendí á decir verdades. — No hace cosa justa el que desaprende lo que aprendió.» Villalobos, Anfitrión (R. 36. 4731). «Ellas deprenderán bien á leer latín, porque está mandado no se reciba ninguna sin saberlo.» Sta. Ter. Cartas, 3. 6 (R. 55. 242). «Deprenda del señor el criado, y la criatura de su Criador, y el hombre de su Dios. Deprenda la tierra á estar debajo de los pies, y deprenda el polvo á tenerse en lo que es, y el cristiano deprenda de Jesucristo, que fue manso y humilde de corazón.» Gran. Doctr. crist. 2. 14 (R. 11. 1191). «Dijo san Crisóstomo que todos los santos que en el Viejo Testamento propusieron á Dios esta dificultad quedaron sin respuesta, y se les negó de industria para que los del Nuevo Testamento --- deprendiesen á no molestarle con ella.» Márquez, Gob. crist. 2. 23 (297: Pamplona, 1615).

Per. antecl. Siglo XV: «El tiempo que se pasaba siempre lo tenía presente, porque gozaba en la hora presente de lo que en la pasada había deprendido.» Pulgar, Clar. var. 24 (137). «Hazed que deprendan temer a su rey ½ Porque justicia no ande por suelo.» Mena, Lab. 230 (811). «Narbaez aquel, el qual agramente ½ Muriendo deprende a vengar la muerte.» Id. ib. 196 (692). «E por esto serie muy bien ---cada vn dia por la mañana llegasen en ella [en la escuela] a deprender por las rreglas dichas la manera de cortar.» Villena, Arte cis. 18 (108). «Sobre çinco cossas pone su rrequesta, ½ Segunt yo deprise é vos non dudedes.» Canc. de Baena, p. 528. «Otro sy en vacuo no son movimientos ½ Segunt deprendí por filossofia.» lb. p. 514. «Deprenden de nuevo otra sutil arte.» lb. p. 62. «Dixo á los dichos embajadores que aquel su fijo avia deprendido, é que era buen gramático en aquella su lengua.» Gonz. Clav. p. 106.

— Siglo XIV: «Lo que honbre mas vsa ½ Eso mejor deprende.» Sem Tob, 117 (R. 57. 3382). «Muchos ai que trabajan siempre por cleresia, ½ Deprenden grandes tiempos, espienden grant quantia, ½ En cabo saben poco.» Arc. de Hita, 115 (R. 57. 2302). «Et si home quisiese por manera de disputacion deprehender esto bien, lo podria facer.» J. Man. Lib. de los est. 2. 7 (R. 51. 3491).

— Siglo XIII: «Nin le muestre cleresia quanto él podria deprender ½ Sinon es Sant Isidro que es en tal afer.» S. Ildef. (R. 57. 3241). «Et para esto ha mester que la compaña que los hobiere á traer sean mucho apuestos et limpios, pues que los fijos de los reyes dellos lo han de deprender.» Part. 2. 7. 2 (2. 44).

Etim. Port. ant. deprender: del lat. deprendere, tomar, coger, percibir, notar, compuesto de de y prendere, tomar. La partícula se refiere aquí al origen del conocimiento, al revés de ad en aprender, que señala el objeto á que llega ó penetra. El sentido originario de Coger aparece en este lugar: «Si en alguna cosa lo querien deprender, ½ ¡Quomo se sabie dellos guardar e defender!» Berc. Duelo, 67 (R. 57. 1332).