DECAER. DECAER.
v.
1.
Ir á menos, perder una
persona ó cosa parte de su bondad, importancia ó valor (intrans.).
—
a ) «Esta agricultura puede muy bien decaer, y ser inferior al
consumo de cada provincia.» Jovell. Ley agraria, lª. clase
(R. 50. 1102). «Todos estos objetos
se trabajan en la mayor parte del reino, sin gremios ni ordenanzas; y ni el público se
queja, ni la industria decae.» Id. Inf. sobre el
libre ejerc. de las artes (R. 50. 391). «La confianza y benevolencia nacional, que rodearon á la Junta
Gubernativa en sus primeros días, no decayeron del todo en medio del gran conflicto en
que puso á la patria la segunda irrupción de los franceses.»
Id. Def. de la Junta Central, 1, preámb, (R. 46. 5071). «Ya las fuerzas de los Teucros, | Mudada la fortuna,
decaían.» T. Iriarte, Eneida, 3 (3. 179). «Andando el tiempo, si la reputación de Pitt como político
ha sido más ó menos contestada, su concepto como orador nada ha decaído.» A. Galiano, Hist. lit. p.344. «No quiso nunca aceptar los cargos que le ofreció varias veces por no
decaer en el concepto de sus compatriotas.» Gil y Zárate, Resum.
histór. p. 504.
—
a a ) Part. dep. Estaba muy decaída
la pintura.
—
b ) Con de,
para expresar aquello de que se ha perdido alguna parte. «Oviedo ha decaído mucho de su antiguo esplendor, cuando corte de los
reyes de Asturias, era centro y residencia de los grandes y nobles del reino.» Jovell. Corresp. con Posada (R. 50. 1902). «La literatura y la poesía castellana acabaron de
naturalizarse con la capital de Aragón, y por consiguiente decayeron de su antiguo
esplendor el gusto y cultura del idioma lemosino,» Mor. Orig.
disc. hist. (R. 2. 155). «Precisamente
por haberse mudado las costumbres, por no parecerse ya los españoles que hoy viven á los
que existieron dos siglos ha, las comedias escritas en aquel tiempo han decaído de la
estimación que tuvieron.» Id. Com. disc. prel.
(R. 2. 324). «Las dos repúblicas [de Venecia y
Génova], en otro tiempo tan florecientes, habían ya decaído de su antigua grandeza.» M. de la Rosa, Esp. del siglo, 3. 2 (5. 174).
—
«Mas no por eso los
dos hermanos decayeron de ánimo: antes bien con toda diligencia y esfuerzo alababan á
los valientes de su bando.» Quint. Pizarro (R. 19. 3492).
—
a a ) Part. «La república de Génova, decaída de su antiguo esplendor y poderío,
pero ansiosa de conservar los restos de su comercio y opulencia, se hallaba también en
una situación semejante respecto de Francia.» M. de la Rosa, Esp.
del siglo, 3. 10 (5. 204).
—
g ) Con en,
para denotar aquello en que aparece la pérdida. «Decaer
en fuerzas.» Acad. Gram. «Mas ya entonces este gobierno había decaído tanto de su antiguo
esplendor, cuanto el castillo en fuerza y consideración.»
Jovell. Mem. del castillo de Bellver (R. 46. 4212). «Y el Redentor de los hombres no quiso enviar sin comer á
los que le siguieron por el desierto, para que no desfalleciesen en el camino y decayesen
por falta de alimento en el bien comenzado.» J. de los
Ángeles, Conq. del reino de Dios, diál. 7, § 15 (293).
—
a a ) Alguna vez denota el punto á que llega lo que
declina. «No siempre hay [en las tragedias de
Lupercio de Argensola] la elevación necesaria, y el estilo suele decaer en humilde y
bajo, siendo por el contrario otras veces demasiado lírico.»
Gil y Zárate, Resum. histór. p. 249.
2.
mar. Separarse hacia sotavento
del rumbo que se lleva (intrans.). «Iban
con ánimo de seguir la misma derrota de la jornada antecedente; pero decayendo algunos
grados por el impulso de las corrientes, dieron en la isla de Cozumel.» Solís, Conq. de Méj. 1. 5 (R. 28. 2122). «Reconoció el piloto por la brújula y carta de marear, que
habían decaído tanto del rumbo que traían --- que sería temeridad el volver atrás.» Id. ib. 1. 14 (R. 28. 2211).
Per. antecl.
Siglo XV: «En chico lugar avrán su cabida, | Será la tu silla real
decaida, | En otro mudado tu nombre de Godo.» Diego del
Castillo (Rim. inéd. 375). «Sennora,
mal cabo hayan | Los servicios que vos fise, | Los quales aun mas decayan | Que non
vuestra boca dise.» Canc. de Stuñ. p. 239. «Avian gran miedo de perescer en la costa de Valencina,
porque el viento siempre los facia decaer sobre aquella costa.»
Crón. P. Niño, p. 166. «Que
siempre floresca á modo de flores | Que nunca decaen en muy verde prado.» Canc.de Baena, p. 216.
— Siglo XIII:
«Et
tal home como este, cuando cuida que está mas honrado é mas firme, fállase decaido de
aquel bien que ha.» Cast. é docum. 41 (R. 51.
1652). «Eso mismo dezimos de los ---
que fueren ricos e onrados, e despues venieren a pobreza en manera que el rey entienda que
son muy decaidos del estado en que solian estar o seer.» Espéc.
5. 14. 15 (O. L. 1. 461). «Ca nos vimos ya
muchos omnes de nuestra gente de los mayores et de los menores, que foron decaidos en
pobreza.» Fuero Juzgo, preámb. 4 (VI
). «Mestre Aristotil uieio e decaydo.» Alex. 183 (R. 57. 1531). «Todos lo entendemos, cosa es conosçida, | La eglesia de Silos commo es
decaida.» Berc. S. Dom. 202 (R. 57. 461)
Etim.
Port. decair; cat. decáurer;
prov. dechazer; fr. déchoir; it. decadere: del. lat. bajo decadere
por decidere, compuesto de de y cadere, caer. Véase Diez, Gramm.
2, p. 386.
Conjug.
Sigue la del simple caer.