COTEJAR. COTEJAR. v.
a) Examinar un objeto para estimar el grado de sus cualidades ó las
circunstancias que lo constituyen mejor o peor que otro (trans.) (ant.). «¿Qué perro es éste, que tiene señales de ser bueno?
Bien lo puede vuesa merced creer, respondió el pastor, que yo le he cotejado bien, y no
hay señal en él que no muestre y prometa que ha de ser un gran perro.» Cerv. Col. (R. 1. 2282). «Pareceráles que no se compadecen con nuestra edad y vida acciones tan
heroicas, porque la impiedad de sus ánimos no les deja ahondar más profundos cimientos:
son los suyos de arena, y como deleznables, cotejan y regulan por sí mismos los efetos
ajenos.» Césp. y Men. Sold. Pínd. 1. 21 (R. 18. 3171).
«Con una modestia excesiva dio [el duque de
Guisa] en cotejar á su tío y en temer ser rey.» Coloma, Guerras
de los Est. Bajos, 6 (R. 28. 742). «Cotejad ahora brevemente esta diferencia; ¿quién somos, señores, y
contra quién nos armamos?» Melo, Guerra de Catal. 3 (R.
21. 4881).
b) Comparar y confrontar una cosa con otra teniéndolas a la vista. Se dice de
lo material, y por extensión de lo inmaterial (trans.).
— a ) Aparece
como acus. uno de los objetos comparados, y el otro lleva con, cual si fuese la
medida, el tipo que se emplea para la estimación. «Como hacen los mercaderes, cotejando unas piezas de púrpura con otras,
para que lo subido desta descubra lo bajo de aquélla, y se haga estimación cierta de
ambas.» Saav. Emp. 16 (R. 25. 442). «A cada palabra que leía ponía los ojos en D. Quijote, y
iba cotejando las señas, del mandamiento con el rostro de D. Quijote, y halló que sin
duda alguna era el que el mandamiento rezaba.» Cerv. Quij.
1. 45 (R. 1. 3832). «Este libro de
Valcavado habían traído agora aqui a León para cotejarlo con estotro de san Isidoro, y
así yo lo vi.» A. Mor. Viaje, p. 52. «No solamente he trabajado en verlos [aquellos libros] y
examinarlos, que es lo que el Consejo mandó, sino también en cotejarlos con los
originales mismos que estuvieron en mi poder muchos días.»
León, dedic. Obr. Sta. Ter. (4. 210). «Por tanto, todos han de procurar, y principalmente los sacerdotes,
aplicarse á las ]enguas orientales, para no llegar á interpretar cosa alguna sin haberla
bien antes examinado y cotejado con las fuentes orininales y lugares paralelos,
valiéndose para esto de las concordancias y otros subsidios.»
Scío, Biblia, disert. prel. 2, § 4.
— «Aunque en esto
decía verdad [el fariseo], cotejaba su justicia con las obras exteriores pasadas del
publicano; por lo cual salió condenado por presumir de justo.»
Venegas (Capm. Teatro, 2. 272). «Es
inclinado [nuestro entendimiento] á cotejar unas cosas con otras, discurriendo por
ellas.» León Nomb. 2, Brazo (3. 146). «Quien considera lo que deben ser las mujeres y lo que ellas
mismas se hacen y quien mira la alteza de su naturaleza y la ba jeza en que ellas se ponen
por su mala costumbre, y coteja con lo uno lo otro, poco dice en llamarlas ansí.» Id. Perf. cas. 9 (3. 461). «Lastímame
mi vida, Señor, cuando la cotejo con la suya., Sta. Ter. Fund. 4 (R. 53. 1871).
«Cotejando con su experiencia la lección del Eclesiastes, viendo como era todo uno ---
trocó totalmente la vida.» Sig. Vida de S. Jer. 4. 6
(296). «Este fue el fin de la santa reina doña
Catalina --- Veamos el fin de Ana Bolena, que le sucedió en el reino, y cotejemos linaje
con linaje, vida con vida y muerte con muerte.» Rivad. Cisma,
1. 33 (R. 60. 2182). «Quien le
leyere [aquel decreto] y cotejare bien lo que en él se dice con lo que en verdad pasa,
verá claramente que se hizo sin tener noticia de la verdad.»
Id. Vida de S. Ign. 4. 11 (R. 60. 1082). «Cotejaban los méritos con las mercedes.»
Melo, Guerra de Catal. 1 (R. 21. 4652). «Otros dicen que cotejándole con su instrucción secreta, juzgó ser
éste el uno de los casos en que se le ordenaba la retirada.»
Id. ib. 4 (R. 21. 5151).«Cuando
el espectador ve representar al vivo lo que oyó contar desde su infancia, siente un
placer sumamente grato; coteja con gusto sus vagos recuerdos con los sucesos que ve ante
sus ojos.» M. de la Rosa, Moraima, advert. (3.
191). «No basta, repito, hacer, una
enumeración prolija de lo que hicieron los gobiernos, si no cotejarlo con las necesidades
de los pueblos, y volver la vista á lo que dejaron de hacer.»
Id. Esp. del siglo, 1. 5 (5. 17).
— a a ) Refl. «¿Qué locura y liviandad ½ Es querer tú en dignidad 1 Cotejarte aquí conmigo?» Castillejo, 3, diál. entre Mem. y Olv. (R. 32. 2133).
«Nunca dejemos de examinarnos y juzgarnos, ni
de poner los ojos en las vidas y costumbres de aquellos clarísimos padres que
resplandecieron como lumbre del cielo, examinándonos y cotejándonos con ellos.» Gran. Esc. espir. 22 (R. 11. 3421).
— b b ) Pas. «Parece que dan muestra de edificio más nuevo, si se cotejan aquellas
murallas, mayormente las dichas torres, con la parte de los muros de Toledo que edificó
el rey Wamba.» Mariana, Hist. Esp. 4. 14 (R. 30. 1061)
«En dos epístolas escritas á Dámaso está
repartida esta disposición, en que San Jeronimo, hizo prueba de su ingenio. Cotéjense
con lo más erudito de toda Iglesia griega, y latina si se hallará cosa mas grave ni mas
cabal, para que se en tienda que en lo que Jerónimo probó la mano y donde comenzó su
ingenio, es donde podemos decir que acabaron los muy aventajados padres de la Iglesia» Sig. Vida de S. Jer. 3. 4 (167). «¿No sería regular que, cotejándose los defectos del sistema antiguo
con las ventajas del moderno, se abrazase éste?» T. Iriarte Liter.
en cuaresma (7. 37). «Cotéjense sus
composiciones [de Mena] con las de los poetas coetáneos suyos, y se conocerá fácilmente
esta intención.» Lista, Ensayos, 2, p. 18.
— g g ) Part. «Ellos, cotejado el un tiempo con el otro, juzgaron les estaba más a
cuento y mejor obedecer á su príncipe con seguridád, que la contumacia con peligro y
daño.» Mariana, Hist. Esp. 13. 22 (R. 30. 3982).
«¿Qué proporción puede haber del tiempo
breve á la eternidad, con la cual cotejados diez mil años no son más que una gota de
agua respecto de la inmensidad del mar?» Rivad. Trib. 1.
8 (R. 60. 3731).
— b ) Con á,
á semejanza de comparar (raro). «Ya que
de estas cosas se entienda, no quiere que se tengan en poco en sí mismas, sino cotejadas
á otras mayores.» Ávila, Audi, 76 (2. 24).
— g )
Aparece como acus. el conjunto de los objetos comparados. «El cotejar después los unos y los otros ejemplares, que era menester á
cada paso, [era] trabajo incomportable.» Sig. Vida de S. Jer.
4. 4 (255). «Las sepulturas --- tienen todas
sus epitafios en latín, en verso algunas y otras en prosa, y tiénenlos muy fielmente
sacados los canónigos en una tabla, que yo los cotejé y los llevo.» A. Mor. Viaje, p. 42. «De
allí sacaba la azucena y rosa, ½ Y la llegaba á su purpúreo rostro ½ Y á su
cándido cuello, cotejando ½ Las colores, y luégo muy ufana ½ De la victoria, un tanto se
lo reía, ½ Como diciendo: Yo en efeto os venzo.» Jáur. Aminta,
2 (R. 42. 1382). «El primero [el
Fuero Real] quedó en vigor en todo lo que no fuese contrario; y quien cotejare los dos
códigos hallará que la derogación pudo alcanzar a pocos y señalados artículos.» Jovell. carta al Dr. San Miguel (R. 50. 1511). «Cotejando entrambas obras, me parece que se descubre en la,
portuguesa el verdadero original.» M. de la Rosa, Trag. esp.
(2. 46). «Y así cotejando las suertes de estos
dos hombres [Lázaro y el rico], tengo de escoger para mí la de Lázaro.» Puente, Med. 3. 24 (2. 172).
— a a ) Con un compl. recípr. «No solamente haga vuestra alteza esta comparación de sus
virtudes y acciones, sino también coteje entre, sí las de sus antepasados. Poniendo
juntas las púrpuras de unos manchadas con sus vicios, y las de otros resplandecientes con
sus acciones heroicas porque nunca mueven más los ejemplos que al lado de otros
opuestos.» Saav. Emp. 16 (R. 25. 452).
— b b ) Pas. «Cotejáronse luégo los trozos de la cadena, y hallaron ser las señas
verdaderas.» Cerv. Nov. 8 (R. 1. 1971).
— g ) Part.
«Cola fue de notar la gran diversidad que
tenían estas gentes, así de figuras y semblantes, como de sus armas y traje: tanto que,
cotejados entre sí, no parecían hombres los unos á comparación. de los otros.» Ocampo, Crón. 5. 34 (2. 534).
— d ) Admite
un compl. con en para expresar el punto á que se refiere la comparación, como el
campo donde se colocan los objetos para el cotejo. «Si se coteja[San Pedro le Roma_], ya en las proporciones ya en los
ornatos, con las pocas que ha perdonado el tiempo y que nos acuerdan la feliz época de
las artes en la antigua Roma, se halla por cierto que es muy inferior á aquellos modelos
admirables.» Mor. Obr. póst. 1, p. 422.
— e ) Falta
á veces uno de los términos de la comparación por sugerirlo el contexto. «No se dice en él [en el manuscrito] de dónde se sacó la
copia, pero se ven señales de la escrupulosidad con que se hizo en las enmiendas
meramente ortográficas que se encuentran entre líneas, é indican que su dueño la
cotejó después de escrita con la mayor y mas exquisita diligencia.» Clem. Elog. de Is.la Cat. ilustr. 13 (Mem. Acad. Hist. 6.
354). «El que deseare ver hasta qué punto
puede llegar nuestra lengua á competir con la italiana, coteje la traducción del Aminta
hecha por Jáuregui luchando con un poeta tan esclarecido como Tasso.» M. de la Rosa, Anot. de la Poét. 2. 16 (1. 140).
Per. antecl. Siglo XV: «i Que cosa tan d’escusar ½ Vender miel al colmenero --- ½ E con blanca
flor de lis ½ Cotejar symientes prietas ¡» A. Montoro
(Santill. CXXII). «Coteja con los ajenos ½ Mi pecado, y
fallarás ½ Quanto es en fama mas ½ Tanto ser en culpa menos.» Mena (Canc.
de G. Manr. 1. 273).
Etim. Port. cotejar. En it.
quotare es poner por su orden, señalar el lugar que por su orden corresponde á algo;
en prov. quotar, fr. coter, marcar por su orden; en cat. cotar,
tasar, medir; en val. cot, regla, medida ó tasa, que es nuestro coto por postura,
tasa y por la medida que consta de los cuatro dedos de la mano cerrada ésta y levantado
sobre ella el pulgar. Todas estas voces proceden del lat. quotus, cuál por su
orden, cuál en la serie (correspondiente á los ordinales primus, secundus, etc.).
El sufijo.de nuestro verbo es etimológicamente el mismo que car (lat. icare) en cuartear,
prorratear (véase Diez, Gram. 2. 366 sgs.). Así que Covarrubias anduvo
acertado diciendo que se dijo de quotus, a, um, «porque apreciamos cada una cosa en lo que vale y se puede estimar.» En APODAR notamos cómo del sentido de Calcular, estimar, se pasa al de
Comparar, tomándose una cosa como medida de otra. Agregaremos el ejemplo no menos curioso
de asmar = estimare, que de Apreciar pasó á significar Comparar: «Si él podiese probar manifiestamente quel fue fecha
fuerza, o robo ó engaño, maguer non podiese averíguar quantas cosas perdió por aquela
razon, nin quanto valien, debe et puede el judgador asmar et apreciar segunt su alvedrio
aquellas cosas que dice que perdió.» Part. 3. 11. 2 (2.
471). «El juzgador debe catar quales la persona
de aquel que lo aprecia et otros la del muerto á quien ficieron la deshonra, et si viere
que es mucho aquello que, demanda, asmadas estas cosas débelo estimar segunt su
alvedrio.» Part. 1. 13. 14 (1. 390). «El judgador deve catar estas cosas, e asmando las unas con
las otras, si fallare que son eguales, deve judgar asi como dixiemos en el comienzo desta
ley.» Espéc. 4. 7. 33 (0. L. 1. 213). «Non fables ante ningun omne fasta que oyas sus palabras, e
asmarás la tu sapiencia con la suya.» Buenos proverbios (Knust.
59).