s.v., SER, las formas de este verbo castellano resultan de una fusión de las de dos verbos latinos: la mayor parte proceden del lat. ESSE íd., pero las demás, incluyendo el futuro, el condicional, los presentes de subjuntivo e imperativo, y las formas impersonales, vienen del lat. SEDERE ‘estar sentado’, que debilitó en cast. y port. su sentido hasta convertirse en sinónimo de ‘estar’ y luego de ‘ser’. 1ª doc.: orígenes (varias formas se encuentran en las glosas de Silos y de San Millán, del S. X; el infinitivo sedere significa ya el sentido ‘ser’ en aquéllas). [Corominas y Pascual, DCECH, vol. V, p. 213].