Luego.

s.v., LUGAR, del lat. LOCALIS ‘local, del lugar’, derivado de LOCUS ‘lugar’, al que sustituyó porque su descendiente arcaico luego se confundía con el adverbio de igual forma. 1ª doc.: locar, doc. de 933 (oelschl.); logar, Cid, etc.; lugar, doc. leonés de h. 1100 (M. P., Oríg., 169).

         Logar es todavía la forma normal en Berceo (Mil., 317c, 725a, 896b, 878cA) y en otros textos del S. XIII. [...] Durante mucho tiempo, sin embargo, coexistirían logar y luego como sinónimos, de donde pudo nacer una forma contaminada *luegar o *luogar, que después se reduciría a lugar. […] DERIV. […] El adverbio lat. ILICO ‘inmediatamente’, propiamente compuesto de IN LOCO ‘en el lugar, allí mismo’ […], fue restituído en latín vulgar, de acuerdo con las tendencias generales de este lenguaje, en su forma prístina, y abreviado en LOCO, de donde el fr. ant. lues, el port. logo y el cast. luego [lueco, med. S. X, Glosas Emilianenses, 2, traduciendo a repente; luego, Cid, etc.; la variante lugo debida a reducción en el uso proclítico se halla ya alguna vez en Berceo y en la1ª Crón. Gral., es frecuente en Juan del Encina, y hoy pertenece al habla vulgar de los judíos, de los aragoneses, y de otras partes, RFE XVII, 124-5, n.; Cej. IX, §152; ast. lluego, V]. [Corominas y Pascual, DCECH, vol. III, p. 710].